ALIANZA 4 PASAQUINA 0, Y PASA A LA SIGUIENTE RONDA

El blanco sigue vivo en el torneo. Ante Pasaquina, Alianza logró la clasificación a las semifinales, luego de derrotarlo este domingo 3-0, y avanzar con un global de 4-0 (ida 1-0). Se verá en la siguiente instancia con Isidro Metapán, que el sábado ganó su serie a L.Á. Firpo. El equipo capitalino volvió a mostrar su dominio, su mejor juego colectivo y el favoritismo con su gente, que estuvo fiel en el Cuscatlán.

Pasaquina salió con un 4-4-2, dos elementos en ataque, en los que estaba el goleador del torneo, Javier Lezcano, y varios elementos ofensivos en la media. Mientras Alianza plasmó un 4-4-1-1, con solo Fito Zelaya adelante, pero con gran intervención de Luis Hinestroza, por izquierda.

Los burros sabían que tenían que ganar con diferencia de dos goles para acceder a la semifinal. Sin embargo, el gol era un “hueso duro” ante una ordenada defensa blanca. Lo intentó, con dos individualidades muy tibias, Romel Mejía, que se movía por derecha. Mientras Lezcano no tuvo mucho peso, en diez minutos.

Alianza llegó con dos acciones al área defendida por Walter López. Pero con estacionarias de liguero peligro. Hinestroza, un dolor de cabeza para Tony García, y Fito trataron de sorprender a puerta, además de tres tiros de esquina que en el primer cuarto de juego solo eran parte del acoso paquidermo sobre Pasaquina.

Fue la tercera de esas estacionarias que más alertó a los burros, cuando tras recibir centro desde la esquina, Zelaya acomodó y tocó de primera a puerta, y a una mano López lo rechazó sobre el travesaño. Lo salvaba el arquero, la afición ahuecaba el “uuuhhh” en su garganta, el juego vertical de Alianza no daba respiro.

Pasaquina tenía un panorama complicado, sobre todo porque le era difícil partir de la media, generar juego por carril central, y quedaba al límite de la tómbola central. Estaban solos Lezcano y Mejía, que no recibían balones, y los largos se perdían en las anticipaciones albas.

Alianza, además, se vio obligado a realizar una sustitución tempranera. Pero fue para bien. Rudy Valencia no pudo continuar en la cancha, al salir tocado de la rodilla izquierda, y llegó en su lugar Isaac Portillo. Contención por contención, pero con el gol en el botín (23’).

Tres minutos en el campo, y “Clavito” Portillo resolvía el tanto que Alianza estaba buscando. Una estacionaria en la que Larín disparó y llegó el rechazo de López, el balón quedó cerca de Zelaya, pero Portillo tocó potente y la mandó al fondo (1-0). Intenso el juego de Hinestroza, quien con velocidad encontró el segundo, desplazándose por la izquierda, sacando de su área a López y sirviendo un centro medido para que Alex Larín definiera frontal a marco el segundo (38’).

Dueño del juego era Alianza, con todo el ritmo y dinámica, con posesión de pelota y fino en la definición. El equipo buscó el tercero, lo intentaron con sus disparos Fito y Óscar Cerén, solos y combinados, mientras Pasaquina estaba ahogado atrás, defendiéndose, resignado al acoso y pidiendo el descanso. Para terminar más cuesta arriba, terminó expulsado Tony García, quien libró un duelo muy cerrado con Hinestroza siempre, y le cometió una falta que lo mandó al camerino con roja directa, en el tiempo agregado (45’+3’).

Dueño del partido

Al igual que Valencia, que se fue por lesión, también terminó tocado Cerén y no jugó más el complemento. La llegada de Juan Carlos Portillo permitió que Hinestroza cambiara de carril y jugara por derecha. Rápido “la Cabrita” Portillo metió un centro a Fito, que salió al achique con anticipación López. El guardameta de los burros siguió exigido, pero respondió como figura de su equipo.

Pasaquina no dejó de luchar, a pesar de que los albos estaban más cerca del tercero. El global de la serie a favor del cuadro capitalino (3-0) no permitió a los burros bajar los brazos, pero estaban conscientes de que estaban más lejos de clasificar. Los disparos a puerta elevados y sin dirección eran muestra de la desesperación con esperanza de poder obrar un milagro. Pero el partido parecía resuelto y los unionenses resignados a la eliminación.

Los dirigidos por Jorge Rodríguez no cedieron en su orden, en manejar los tiempos, en guiar el partido. No cesaron los remates a puerta, pero la contundencia no estuvo fina, y López no regaló nada en su cabaña. Hasta que cerró la cuenta “Cabrita” Portillo, tras una asistencia del cafetero Hinestroza. Alianza terminó así como dueño del juego, sin despeinarse. Y pasando la página para pensar ya en Metapán, su rival de semifinales.