"No pensamos llevárnoslo a ninguno otro lugar, este estadio es grande, es más grande que el de San Miguel, el de Usulután, el de La Unión. Le caben 8,500 personas y vamos a jugarlo aquí", declaró Luis Gálvez, gerente de la UES.
Según Gálvez, el cuadro universitario está consciente de que "es un partido de alto riesgo, pero se pedirá a la Liga la solicitud de apoyo de la PNC, y nosotros haremos lo mismo que cuando recibimos a cualquier otro equipo, no cambiaremos nada".
En ese sentido, señaló que se abrirán todas las taquillas (sol, tribuna y platea), el número de colectores serán los mismos, las horas de venta de boletos serán desde la mañana. Y aseguró: "A (Lisandro) Pohl se le darán 300 boletos para que se los venda a la Ultra. La afición será ubicada en el sector de sol general sur, pegado (a la izquierda) de la platea".
Sin embargo, el gerente fue claro al mencionar: "Lo que sí es que no todos los aficionados del Alianza van a poder entrar, eso está claro, también debemos darle espacio a nuestra afición. Además, queremos probarnos a nosotros mismos que podemos manejar lo logístico, lo administrativo de este juego. Ya tuvimos a FAS, a Firpo, esta es una barra más aguerrida, y aquí la tendremos".
Gálvez se animó a subrayar que con todo esto "se quiere ver un clásico positivo, con mucho respeto para Alianza".
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