El planteamiento de los equipos hizo presagiar que sería un juego bastante estratégico, lo cual se comprobó desde los primeros minutos. Se veía que ambos técnicos habían estudiado detalladamente a su rival.
Por eso, ambas delanteros, así como los carrileros, no tuvieron un partido cómodo debido a las marcas a que fueron sometidos.
Siempre, Mauricio Quintanilla, Edwin Martínez y Carlos Arévalo sobrando en los relevos que hacía Marcelo Messias para aguantar las llegadas de Cristian Bautista y Alexander Campos. Mientras que, en el otro sector, Adán Reyes no se le despegó al paquidermo Rodolfo Zelaya.
En los laterales, en la velocidad estaban los duelos de Cristian Castillo con René Ramos, por un sector. Mientras que en el otro lo hacían Julio Martínez con Wílbert Henríquez.
Aunque las llegadas no eran de ida y vuelta, el partido tenía una buena dinámica por el empuje que los mediocampistas querían aplicar en ataque. Alianza tenía mayor proyección, pero no mejor claridad en sus llegadas.
Los capitalinos incomodaron con dos disparos el primero, al minuto 16, con un tiro libre de Arévalo que se fue cerrando hasta pasar cerca de la meta defendida por Hernández. Tres minutos después, en una corrida de Zelaya por derecha, sacó un disparo cruzado que se abrió demasiado y terminó desviado.
Por estas aproximaciones, Alianza se había visto mejor. Pero en treinta minutos el partido no tenía un claro dominador.
En el 30', Alianza tocó puertas a gol, cuando ejerció una constante presión tras una serie consecutiva de cuatro tiros de esquina, donde el brasileño Willer Sousa fue el más peligroso. En una oportunidad, probó con el "tiro de esquina olímpico" que pegó en el larguero. Después recibió el centro pasado de Castillo, en el segundo poste, que se estrelló en el tubo y luego fue rechazado por un defensor.
Para los últimos diez minutos, Balboa se soltó la presión y se acordó de atacar. Lo hizo con algunos disparos largos, para intentar penetrar a la defensa con balones a profundidad. Lo único que generó con eso fue un tiro de Julián Cruz al borde del área grande, que fue achicado por Edwin Martínez, en el 38'.
Aunque Balboa tenía mejor posición en ataque. La última del primer tiempo sería color blanco, con un balón que robó Reyes en el medio terreno, pasó a Martínez, quien al entrar al área sacó un disparo cruzado que Adán Reyes desvió engañando a su portero, pero que por suerte la pelota abrió demasiado y terminó desviada a tiro de esquina,
Fuentes, como grande
Para el segundo tiempo, los albos tuvieron que realizar una modificación obligada, ya que el portero Douglas Batres se lesionó, en el 47', al achicar el remate de Cristian Bautista, quien lo golpeó en la mano tras el tiro de Campos.
Esto llevó al ingreso de Rafael Fuentes, quien no estaba al cien por ciento para este partido debido a que no se recupera del todo de su rodilla derecha. Fuentes fue recibido con un disparo de Bautista desde el borde del área, con el que el meta fue probado con sus reflejos, en el 53'.
El meta capitalino mostró mucha seguridad, cuando fue exigido en otras oportunidades, en las que tampoco llevaban mucho peligro. Sin embargo, le mostró confianza a su defensa que por momentos dejó el fondo de la zaga para sumarse al ataque.
Para esta segunda parte, la propuesta de los atuneros era de controlar la pelota y cerrar más espacios al ataque de los paquidermos. Alianza también tuvo más cuidado con el accionar de los atacantes atuneros, que trataron de hacer daño con toques cortos y al espacio.
Ante el cuidado de los dos equipos, por concentrarse en la marca en el mediocampo, el partido cayó en muchas imprecisiones y disparos desviados, que no causaron mucho daño.
La mejor de Alianza, en el segundo tiempo, fue un disparo de Abraham Amaya, en el 82', tras controlar en el área un centro largo de Sousa, por derecha. Pero al momento de definir, lo hizo con potencia y completamente desviado.
Los últimos minutos fueron de aguantar por parte de Balboa, el ataque había quedado en segundo plano para no arriesgarse atrás y cuidar el resultado.
El negocio ya estaba plantado, los unionenses llegaron a San Salvador e hicieron lo propio, al sacar el empate que les sirve para sumar y mantenerse con muchas esperanzas.
Por su parte, Alianza no se complica, pero tendrá que sacar sus conclusiones.
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