No fue un partido placentero, por más que los capitalinos monopolizaron el juego. Es más, se sufrió más de la cuenta porque en este torneo nunca les había tocado remar contra marea. No ocurría algo parecido, desde la ida en las semifinales del Apertura 2010 contra Luis Ángel Firpo. Esto creó un ambiente tenso y con mucha ansiedad. Su rival estuvo a pocos instantes de ponerle el cascabel, un resultado que habría sido la campanada de la jornada.
El monólogo albo comenzó desde los dos minutos, cuando Hérbert Sosa filtró un pase mortífero hacia Abraham Amaya, quien no alcanzó a chutar por el cruce a Andrés Medina.
Este inicio voraz casi da frutos un minuto más tarde con una pared entre Amaya y Salazar para que Burgos rematara con la zurda y enviara un balón rasando el poste derecho.
Una polémica surgió muy temprano en el partido, con un amarre del zaguero Mario Cruz sobre Amaya, dentro del área. El silbante Joel Aguilar no señaló nada. Era penal.
Cuando parecía que Balboa había dejado su alma en La Unión, superó los tres cuartos de cancha y tuvo Wílmer Henríquez una jugada a balón parado pero la desaprovechó, merced de su mala puntería. Pero luego tuvo otra al 19' y mejoró al enviar un tiro con dirección a puerta.
La precisión comenzó a fallar para los albos. Amaya ganó en carrera por izquierda y, en lugar de buscar el gol o de asistir a Burgos que se internaba en el área, retrasó el balón y la regaló a la defensa churriera que se recomponía.
Por segunda ocasión, Alianza pidió penal al 27', tras una marca apretada de Cruz sobre Zelaya. Aguilar previno al atacante albo de amonestarlo si vendía "un piscinazo". Pero Zelaya cobró coraje, tras el llamado de atención y sobre la media hora pudo anotar en un tiro de media distancia, pero Cuéllar estaba bien ubicado. Posterior a esto, Castillo con un tiro raso también envió un aviso, pero el gol no llegaba ante un Balboa que se refugiaba en la pecera.
La mejor jugada llegó al 36', con un remate de Amaya y que ya tenía vencido al portero pero Adán Reyes sirvió de muralla. En respuesta, "el Murciélago" Campos probó a marco, pero Messias desvió y concedió el primer tiro de esquina del rival. Henríquez quiso probar también, pero sin dirección.
Al 39', Alianza tuvo una tocazón que casi termina en la red. Castillo envió el balón al pleito, Burgos recibió de cabeza y buscó a Zelaya quien se lanzó de media chilena, pero en el rebote conectó Maradiaga y Cuéllar atajó.
Alianza no se quedó con el dulce y puso contra las cuerdas al Balboa, con un cruce de Burgos en el área, logrando levantar el esférico sobre las manos del portero y cuando toda la afición gritaba gol, Alexis Hernández sacó en un último esfuerzo.
Ansiedad y obligación
En el complemento, Sosa pudo desatar la euforia en un balón cruzado al 53' que se fue muy pegado de la base del poste derecho. Pero la tensión llegó un minuto después. En una contra, Webster entró con comodidad al área grande, vio a su compañero Campos y éste marcó de derecha para avisarle al Alianza que el exceso de confianza tiene un precio.
Alianza pidió otro hipotético penal, después que Ramón de Paz rozó el balón con su brazo derecho al 64', pero no fue intencional. Después hubo una mano de Adán Reyes. Pero no el día de los penales. Al 73', con casi todo el equipo blanco volcado, Julian Cruz pudo sentenciar, pero Edwin Martínez lo alcanzó y salvó.
Tres más tarde, Ayala entró por "Fito" y con él la rechifla de reprobación. "El Rapado" respondió con el gol al 89', tras anticiparse a Reyes y Cruz. Así, el empate se consumó con mucha aflicción y le sirve a Alianza para ser segundo.
EDH
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