El juego contra México no es una guerra. Es un partido de ajedrez que comenzó mucho antes del juego ante Costa Rica, y en el que lo táctico y esconder ases bajo la manga puede ser la diferencia, como lo fue, desde el análisis táctico, lo ocurrido en San José.
Rubén Israel, DT de la Selecta, no usó el 4-1-4-1 en los amistosos, en donde Isidro Gutiérrez apenas se dejó ver en ese esquema. Ante Costa Rica, esa fue la sorpresa, y, por las palabras que brindó el DT ayer, podría tenerle otra preparada a México desde lo táctico.
Quizás la sorpresa sea lo opuesto, es decir, dejar entrever que podría haber cambios y no haberlos, ¿o sí?
"Esto no es una guerra deportiva, es un rival importante que nosotros tenemos que saber vencer, y yo me tengo que abstraer de las emociones para saber cuál es el mejor planteamiento para enfrentar a este gran equipo", comentó el DT uruguayo.
Cuando se le preguntó si el grupo estaba bien afirmó que todos estaban muy bien, aunque Dennis Alas tiene un problema en una muñeca que seguramente no privará al capitán de jugar contra los aztecas. Jugará y punto.
"El porcentaje, obviamente saben que muchos van a repetir (jugadores que fueron titulares ante Costa Rica). Algún cambio obedecerá a la táctica, a un cambio de sistema de la figura, y no por fracaso individual. Es lo que estamos estudiando estas últimas horas", dijo.
Eso no se podrá ver por los medios nacionales o internacionales. O por lo menos, esa es la intención. Habrá espacio para los periodistas, como tras el entreno matutino de ayer y el de hoy, pero lo bueno, lo táctico, será practicado a puerta cerrada. Sobre ese tema, el técnico pidió por favor acatar estas recomendaciones.
Lo más fuerte
Más allá del punto, Israel valoró como muy importante el hecho de haber venido de atrás para adelante ante Costa Rica y que el haber demostrado que se puede revertir resultados negativos en la cancha, sirve como un aporte anímico para los mismos jugadores, y para toda la afición que estará cantando el "Sí se puede" mañana en el estadio Cuscatlán.
"Solamente la reacción ya significa un adelanto muy importante en algunos aspectos del equipo; desde lo anímico ganamos una batalla muy importante. Creo que es un cimiento también plantear nuestras fuerzas para el partido contra México", dijo.
Adelantó también algo más Israel en este juego de ajedrez que incluye a la prensa, ese juego de dar espacio para los medios, pero sin revelar mucho al rival. Y es que espera otro volumen de juego con la figura que cambiaría, es decir, un equipo más ofensivo tomando en cuenta que se actuará como local.
"Cuando uno es visitante en un partido eliminatorio, se corren muchos riesgos porque es una serie muy pareja, en donde teníamos a Costa Rica, un rival directo. Mucho de nuestro fútbol lo tuvimos que limitar a una configuración táctica para poder hacer contra tácticos y eliminar riesgos que el rival planteaba. No hemos desarrollado todo lo que podemos desarrollar".
El martes, si la figura sale como se planeó y con el jugador número 12 vistiendo de azul todas las gradas del Cuscatlán, se espera otra cosa, al menos desde el ángulo del entrenador. "La lección fue buena y vamos a tratar ahora de tener más volumen futbolístico", agregó.
Sobre México
Israel entiende que este partido es, sin lugar a dudas, el más "mediático" para El Salvador, quizá el más importante. Aquella frase de "Al Mundial no vamos, pero a México le ganamos" refleja ese pensamiento tan arraigado en nuestra cultura futbolística. Pero Israel también sabe que todas las victorias valen tres puntos y los empates uno. En otras palabras, en las suyas: "La verdad que yo entiendo que en el fútbol, lo mediático es gran parte de pasión. Yo entiendo la rivalidad deportiva existente en la zona, pero para mí es otro partido de tres puntos tan importantes como con Guyana y Costa Rica que debemos buscar", aseguró.
Agregó que a México no se le puede analizar únicamente por lo hecho contra Guyana, cuando periodistas del país azteca le pidieron su comentario sobre los abucheos y las críticas que recibió el "Tri" tras la victoria por 3-1.
"Si me tengo que fijar en los números, después de Colombia (amistoso), vi a un México muy fuerte contra Gales, contra Bosnia y contra Brasil, y luego ganó un partido que tenía que ganar (Guyana). Después los análisis son subjetivos, la mentalidad del mexicano, yo no tengo derechos éticos ni morales para analizarla. Yo sé que ganó 3-1, y que ganó a Gales, Bosnia, y que con (Chepo) De la Torre solo ha perdido un match, así que cualquier análisis no resiste de mucha crítica".
Pasa por El Salvador, no por México
Cuando los periodistas mexicanos quisieron sacar el tema de la supuesta "guerra" deportiva, a raíz de los comentarios del viernes de Giovanni Dos Santos y de algunas publicaciones en medios de aquel país, los dos jugadores que dieron declaración ayer, Víctor Turcios y Osael Romero, le bajaron tono a la situación, fueron cautos y centraron todo en la pelota.
"Respetamos a México, sabemos de sus cualidades, nosotros nos fijamos en lo de nosotros, no en lo que se diga. Tenemos que hablar en la cancha... Lo importante es siempre estar concentrado, sabiendo que es un partido difícil, pero confiamos en nosotros, de la capacidad que tenemos, y, además, con el apoyo de la afición con la que siempre contamos", comentó el autor del empate en San José, el volante del Águila, Osael Romero.
Víctor Turcios, defensa central, agregó que "más que una guerra es un partido de fútbol, una eliminatoria, un partido que vale para nuestros sueños, para los sueños de todos los salvadoreños, estamos en lucha por un país, por ir a un mundial, y eso es más que motivante, creo que el estadio estará lleno, la motivación, el grupo la concentración de lleno para el partido. Estamos convencidos que acá podemos ganar para seguir pensando en la clasificación".
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