La dirigencia de Alianza, encabezada por Lisandro Pohl, solicitó ayer por la mañana que el caso de la sanción de dos partidos a puerta cerrada como local y $2,000 de multa tras las dos explosiones en el estadio Cuscatlán previas al juego ante FAS por la fecha 13 sea conocido por la comisión de apelaciones de la FESFUT, luego de que la comisión disciplinaria le ratificó el castigo, el viernes por la tarde.
“Esto ya corresponde a la segunda instancia que es la comisión de apelaciones. Esperemos que mañana (hoy) pueda ser conocido por el tribunal de apelaciones. Lo importante es que hemos metido en el tiempo esta apelación. Queda confiar que esta vez las cosas si se van a hacer de acuerdo con la legalidad”, apuntó Pohl.
Ante esa postura de Alianza, el jefe del departamento jurídico de la FESFUT, Fredy Lizama, aseguró que coordinará con la comisión de apelaciones la entrada del documento de la petición del equipo blanco.
“Hay que hablar con la comisión de apelaciones para ver qué día se pueden reunir. Esto es un caso imprevisto, hay que convocarlos. Se reúnen cerca de dos veces al año. Son ellos los que van a decidir si procede o no procede”, apuntó el abogado de la entidad rectora del balompié nacional.
Si no hay respuesta que satisfaga a la directiva alba de parte de la comisión de apelaciones, el siguiente paso es recurrir al comité ejecutivo de la FESFUT. Será la última instancia en este caso.
“Yo ya no quiero especular sobre esto. Lo importante es ver si ellos actuaron con razón. Para mí, eso es fundamental. Creo que más allá de que este domingo juguemos de manera normal contra Santa Tecla, nos interesa la reivindicación moral”, apuntó Pohl.
Sobre la barra
El titular de la dirigencia aliancista valoró el sacrificio que hizo la barra del plantel, el domingo, para ver el juego ante Firpo desde la lomita del Estadio Cuscatlán debido a la sanción de jugar sin público.
“No era fácil estar casi tres horas bajo ese sol, pero, la verdad, es de agradecerle ese sacrificio. Ahora ellos tienen que entender que las cosas ya no van a ser iguales”, apuntó el directivo aliancista.
Pohl aseguró que la barra alba tiene que asumir una postura de seriedad, es decir, apelar a la congruencia para tener clara la responsabilidad que, según el dirigente, se tiene con el apoyo al club.
“Ellos tienen que tomar consciencia de que deben cambiar su responsabilidad en cuanto a lo que ellos saben que es permitido en el estadio”, apuntó el dirigente albo, quien vio el juego ante Firpo, junto con sus compañeros de junta directiva, en la platea del Estadio Cuscatlán.
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