¡ROBO EN EL CHIQUERO!
Al remedo de árbitro sólo le faltó ponerse la camiseta bayunca del Aguila
Tras el partido era notorio la inconformidad. Todos los jugadores se refugiaron en un silencio, mientras la barra de Águila ubicada detrás de la banca, lanzaba todo tipo de objetos: asientos de cartón, bolsas con agua, limones,... Las palabras sobraban en ese momento y más porque Alianza tuvo el empate en el suspiro del partido, si no es porque les fue anulado un gol polémico sobre el cierre del encuentro.
Con las caras de pocos amigos, el capitán Ramiro Carballo invitó al grupo a orar, secundado por el asistente técnico Miguel Soriano. Este momento de paz cambió un poco los semblantes de los jugadores capitalinos.
Pero la inconformidad no estuvo en la derrota misma, si no en los yerros arbitrales. El primero en sacarlo a mención fue Álex Erazo: "No entendemos qué pasó porque anoche (el sábado) nos anuló un claro penal y ahora señala un supuesto off side donde no lo hay. Es cierto que Alianza no necesita que le hagan favores pero por estos árbitros los puntos que perdimos nos pueden faltar después". Mientras Luis Anaya dijo: "Invito al señor árbitro a que vea el video en su casa y reconozca que se equivocó. Conseguimos un empate que nos han robado esta tarde".
Lo que comenzó bien, terminó bien para Águila. Lo que comenzó mal, terminó mal para Alianza. El clásico que se quedó a la mitad el sábado, por la fuerte lluvia que cayó sobre San Miguel, se decantó a favor del club emplumado, que hizo bueno el gol que William Torres Cabrera anotó —al minuto 28— un día antes y pudo sentenciar, aunque terminó sufriendo para sumar de a tres.
Y es que Alianza logró, en el arranque del segundo tiempo, ayer y de nueva cuenta en el estadio Juan Francisco Barraza sacudirse el mejor manejo de pelota que había tenido Águila un día antes. Lo demostró en un tiro de Abraham Amaya que pegó en el poste derecho de la meta de Miguel Montes, que despertó al club emplumado.
El susto pasado bastó para que los negronaranja volvieran a proponer a la ofensiva. Y nuevamente fue el portero Dennis Salinas quien se erigió como salvador blanco, cuando contuvo todas las llegadas del local, comenzando con un disparo desde el borde del área grande que mandó con su guante derecho a tiro de esquina.
El cobro derivó en más monopolio del lado del local. El centro alcanzó el botín derecho de Rudis Corrales, cuyo puntazo también encontró los guantes del cancerbero Salinas.
Con el marcador todavía en contra, pero ya con la muestra de que podía hacerle daño a su rival, Nelson Ancheta agregó otro cambio. Sacó a Julio César Hernández y mandó a Cristian Chávez, para tapar la salida por el sector derecho de los orientales.
Empero, el efecto fue el contrario al que quería Ancheta. Águila abandonó el lado derecho y comenzó a apretar por el izquierdo, ahí mismo donde Rudis se combinó con Deris Umanzor, sobre el minuto 65, justo para que el carrilero zurdo sacara un tiro cruzado que no encontró quien la empujara al fondo.
No fue la única, porque tres minutos después Corrales volvió a desaprovechar la oportunidad de conseguir el segundo, luego de sacarse dos defensas dentro del área y tocar la pelota sobre el cuerpo de Salinas. Superado todo lo que debía superar, el tiro iba desviado, para sufrimiento de la afición local y alivio de la visitante.
Las variantes
Nuevamente los emplumados tenían el control de juego. Ancheta quemó su último movimiento: dejaron de gustarle los pases de baile del “Paleta” Erazo y mandó a un más guerrero Enmanuel Quintanilla, mientras su par Eraldo Correia daba por bueno el 1-0 y ya tenía en la cancha a Leonel Guevara y Eliseo Salamanca por Francisco Álvarez y Torres Cabrera, respectivamente.
Así, el club oriental aseguró su retaguardia, pero le entregó la pelota a la visita que, al fin, pudo disponer del esférico para encimar al Águila.
Guillermo Morán pudo gravitar mejor y repartir mejor el juego, favorecido también por el arrojo de Quintanilla, quien tuvo la suya sobre los 82 minutos, cuando sacó un tiro desde la media luna que pasó pegado a la par del poste izquierdo del “Mudo” Montes.
Pese a la ventaja, parecía que se escribía una historia en la que Águila terminaría lamentándose de todas las ocasiones perdidas, porque el tanto de Alianza se respiraba en el aire. Más cuando Rudis volvía a perdonar ante Salinas el que hubiera sido el tanto de la sentencia sobre el '85.
Sucedió. A medias. Sobre el '88, Luis Anaya se descolgó por la derecha y sacó un centro que Abraham Amaya empujó por el segundo palo al fondo de la red. Era la desgracia emplumada y la satisfacción capitalina, hasta que se dieron cuenta que el línea había marcado fuera de juego y que el árbitro central Elenilson Ventura lo había validado, quitándole el punto que tanto había sufrido por conseguir.
Al final, quizá no lo consiguió porque sufrió más el Águila, que así como ha ganado sus partidos a los grandes por apenas 1-0, al Firpo y el clásico nacional al FAS, ayer también se deshizo así del Alianza. Solo resta ver si aprenden la lección y sentencian los partidos cuando tienen chance, para no tener que depender de yerros arbitrales después.
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