GUSTAVO FLORES TWITTER: @GUSFLORES21Lunes, 11 de Junio de 2012
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Un equipo no es la patria y un partido no es la guerra. Una obviedad enorme pero que aclararlo hoy vale más que nunca, cuando las confusiones están a flor de piel, tanto de hinchas como de periodistas y hasta de protagonistas del evento. Es un juego con mucho en juego, en el plano estrictamente deportivo. Es un partido fundamental. Sí, sin dudas. Como lo fue el del viernes en Costa Rica y como también lo serán los próximos cuatro que restarán a partir de mañana.
La expectativa, como cada vez que juega México, es enorme. El Cuscatlán -que abrirá sus puertas 9 horas y media antes del inicio programado para las 7.30 p.m.- repleto de hinchas verá una nueva versión de un partido tomado como un clásico en el país y que algunos mexicanos vislumbran como un trámite más. No debería ser así: hubo experiencias que le costaron demasiado caras a los aztecas, como la recordada última visita del Tri: derrota 2-1 con inolvidables goles de Julio Martínez y Cheyo Quintanilla.
Del lado de El Salvador, el cuerpo técnico decidió jugar, una vez más, al misterio. Sólo el técnico y sus asistentes saben como saldrá hoy al campo de juego y, aunque Israel dijo que se podría cambiar el esquema táctico, todo está por verse. El 4-1-4-1 ideado por el entrenador uruguayo para jugar en Costa Rica se reflejó en un buen resultado final pero también hubo desacoples a corregir.
Lo que parece estar claro es la zona defensiva: Benji es hoy el portero titular del equipo, puesto que se ganó a base de grandes atajadas y fue vital para mantener el empate en San José. Con rendimiento, le ganó la pulseada a la "poca experiencia". La línea de cuatro con Xavi por derecha, Turcios-Purdy la dupla central y Pacheco por la izquierda, también es una fija. En el medio, incógnitas: si el capitán Dennis Alas continúa como único contención metido bien cerca de la línea de 4 (tal cual sucedió el viernes) o si estará en dupla con Elder Figueroa en la doble contención. Si el esquema se mantiene, lo probable que vuelva a jugar Ramón Sánchez, con responsabilidades defensivas en el centro.
Mucho se especula con el ingreso de Eliseo Quintanilla como media punta (su ausencia fue sorpresiva en el partido anterior). Si lo hace, los candidatos a salir serían, siempre en el terreno de las especulaciones, Isidro, Osael o Jaime Alas. Arriba, único punta, Rafa Burgos. Algo hay claro: todos dicen -y sienten- sólo sirve ganar.
Del lado de México todo parece estar más claro, aunque Chepo De la Torre todavía no dio noticias de su once, todo hace indicar que no variaría demasiado del equipo que derrotó a Guyana por 3-1. Un 4-4-2 con nombres que imponen verdadero respeto de mitad de cancha en adelante: Guardado, Giovani dos Santos, De Nigris y "Chicharito" Hernández.
¿Se puede? Sí, se puede. Claro que se puede. ¿Cómo no se va a poder en un estadio que intimida como pocos? ¿Cómo no se va a poder con un equipo que hace de la garra y corazón su marca registrada?
Hoy el Cusca estará a reventar. Pero a no confundirse. Cualquier tipo de violencia perjudicará a El Salvador y a la Selecta. Es apenas un importante partido de fútbol. Nada más que eso; nada menos que eso.
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