Movida coherente en banquillo del Alianza
La directiva del Alianza ha acertado al darle la oportunidad a Rubén Alonso de ahondar en su trabajo pese a que no clasificó.
La decisión de la directiva del Alianza de renovar al entrenador
uruguayo Ruben Alonso en el banquillo albo pese a que fue eliminado en
el repechaje y se quedó sin semifinales puede resultar acertado. El
técnico charrúa logró hacer competitivo a un plantel de la noche a la
mañana y solo la lotería de los penaltis lo dejó sin postemporada. Era
una buena oportunidad para tratar de instalar un proceso y sembrar una
idea de juego que pueda mantenerse a través de varios campeonatos
nacionales.
Además, se asume que serán Alonso y el director deportivo, Miltón Meléndez, quienes estarán a cargo de las altas y bajas en el plantel, y no al revés (primero se arma el grupo y después se designa al entrenador) como se acostumbra en el redondo nacional, un mal del que la directiva del Alianza también ha padecido.
Ahora, una cirugía importante en el plantel puede que le ponga las cosas complicadas a Alonso. ¿Para qué hacerle tanta enmienda a un equipo que comenzaba a funcionar como conjunto?
La continuidad de plantel, cuerpo técnico y plantel es una fórmula exitosa que no han querido perseguir los equipos en la primera división. De hecho, el Universidad y su apuesta por William Renderos los salvó del descenso, aunque luego no pudieran llegar más lejos debido a las deudas salariales que sufrieron los jugadores.
Es más, los equipos que tienen, a estas alturas, un pie en la final del Clausura 2015, son los únicos que mantienen a su técnico desde, al menos, inicios de 2013. Hablamos de dos años de proceso.
Además, se asume que serán Alonso y el director deportivo, Miltón Meléndez, quienes estarán a cargo de las altas y bajas en el plantel, y no al revés (primero se arma el grupo y después se designa al entrenador) como se acostumbra en el redondo nacional, un mal del que la directiva del Alianza también ha padecido.
Ahora, una cirugía importante en el plantel puede que le ponga las cosas complicadas a Alonso. ¿Para qué hacerle tanta enmienda a un equipo que comenzaba a funcionar como conjunto?
La continuidad de plantel, cuerpo técnico y plantel es una fórmula exitosa que no han querido perseguir los equipos en la primera división. De hecho, el Universidad y su apuesta por William Renderos los salvó del descenso, aunque luego no pudieran llegar más lejos debido a las deudas salariales que sufrieron los jugadores.
Es más, los equipos que tienen, a estas alturas, un pie en la final del Clausura 2015, son los únicos que mantienen a su técnico desde, al menos, inicios de 2013. Hablamos de dos años de proceso.