ALIANZA DEBUTA CON TRIUNFO

Sin mucho juego, pero con bastante efectividad, Alianza venció a un Limeño con pocas ideas


El ariete Álex Erazo celebra el 1-0 contra Municipal Limeño. Tuvo un buen juego en el debut blanco en el Clausura 2010. FOTO EDH / douglas urquilla

El espectáculo lo olvidaron en el camerino Alianza y Limeño. Pero eso es lo de menos para una afición blanca que quiere volver a creer, ahora bajo la conducción de Milos Miljanic. Y qué mejor forma para renovar la confianza que con una victoria clara ante el cuadro de Santa Rosa de Lima.

Salvo en el inicio, donde se insinuó al arco rival Limeño con Salvador Coreas y con Garrick Gordon, y en el final, todo fue un monólogo blanco, algo aburrido.

Alianza tenía más la bola, mostraban una sólida línea de fondo, pero no llegaba con claridad. Apenas se aproximaba en un par de tiros de esquina. La defensa rival, en ese momento, absorbía a la tripleta de ataque local, principalmente a Rodolfo Zelaya. Mientras que José Oliveira no terminaba de entrar en el juego y Álex Erazo bajaba a recoger balones.

Fue en un tiro de esquina que se abrió el marcador. Lo cobró Herbert Sosa y casi hace autogol Juan Hernández. En la línea, salvó la defensa. La pelota quedó rebotando y el portero Óscar Martínez rechazó como pudo. Le llegó a Álex Erazo, quien no dudó y firmó el primero de la campaña.

Si no encontraba la pelota la visita, todo se le complicó más a Limeño cuando se fue expulsado Gordon, por doble amarilla, apenas al minuto 38.

Cuatro minutos antes, había golpeado a Marcelo Messías para ganarse la primera tarjeta. Y después, en una acción dudosa, de nuevo el delantero jamaiquino le cometió falta al defensa, a juicio del réferi José Matías Guardado.

Entonces, el monólogo fue completo, aunque carecía de brillantez. Pero en la otra ocasión de toda la primera parte se "acabó" el juego: Zelaya habilitó a Mauricio Quintanilla, quien le tiró un globo al meta Martínez. En la línea salvó Víctor Velásquez y la pelota le quedó a Oliveira, quien remató con dificultad. Volvió a salvar Velásquez y le quedó a Zelaya para otro remate. En el camino, la bola le pegó a Oliveira y terminó en el fondo.

Para la segunda parte, en una brillante asistencia de Álex Amaya, llegó el tercero. Oliveira aprovechó el pase filtrado y definió.

Sobre el final, los locales cedieron terreno y Limeño buscó el del honor. Lo encontró de penal, tras una falta de Messías sobre Irsa Santos que transformó Jílber Álvarez. Al final, un triunfo que da esperanzas, pero que deja también dudas por el fútbol a ratos pobre que mostraron ambos.

CON MUCHA FE

Fe. Eso dejó el arranque de los albos en el torneo Clausura, en el que esperan sea diferente a los que han disputado en los últimos años. El primer objetivo es borrar por completo la sombra del descenso y repechaje, para comenzar a pensar en la clasificación a semifinales y, si la confianza llega, mentalizarse en ser finalistas de nuevo.

Para los jugadores albos, lo que el equipo hizo la noche del sábado fue muy bueno, tanto que alcanzó para derrotar 3-1 a Municipal Limeño.

"Supimos atacar y defendernos muy bien para controlar al rival. Los goles vienen a raíz e esa concentración que mantuvimos en la media cancha para sacar el resultado", explicó el contención paquidermo Álex Amaya del Cid.

El veterano mediocamposta destacó las oportunidades que crearon para anotar frente a los cucheros.

"Hay que destacar ese punto; fue algo de lo que carecimos en el torneo anterior. Pienso que todavía estamos resintiendo el trabajo de la pretemporada, pero eso irá sanando poco a poco, para aprovechar esas oportunidades a gol", expresó Del Cid, quien ya dejó atrás una lesión.