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Alejandro Curbelo llegará el jueves, desde Uruguay, para tomar las riendas de Alianza. En 2009 estuvo en el equipo blanco como asistente de su paisano Carlos Jurado. Las cosas no salieron como ambos esperaban y tuvieron que irse. Pero ahora, con la viñeta de estratega principal, “el Colorado”, como le conocen en la grada alba, ya propuso nombres a la junta directiva para la contratación de su asistente, preparador físico e instructor de porteros. 

Por ahora a Curbelo le preocupa cómo afrontará el primer entrenamiento con el plantel paquidermo. En una plática con LA PRENSA GRÁFICA aclaró que no se fía de haberse ganado, a su criterio, un lugar en la afición del conjunto capitalino. Como jugador fue clave para que los albos ganaran el título en 2004, tras marcar el último penalti de la tanda de definición ante FAS. 

En 2009 llegó como asistente del técnico uruguayo Carlos Jurado. ¿Qué trae ahora para Alianza en su segunda faceta en el cuerpo técnico de Alianza, pero esta vez como entrenador principal?

Lo primero es reordenar el plantel, cuáles serán altas y bajas como pasa en todos los equipos cuando termina un torneo. Hay que comenzar a planificar la pretemporada y preparar el equipo para el inicio del torneo.

¿Sobre qué se puede reflexionar en cuanto a lo último que ha presentado en competencia el plantel albo?

Habrá muchachos que tendrán que buscar un nuevo destino. Pero evidentemente al equipo no le ha ido bien en los últimos torneos desde la parte deportiva. Creo que en el momento que el equipo fue más consistente fue cuando Ramiro Cepeda estaba al frente. El equipo tenía un buen funcionamiento, pero no pudo conseguir el título cuando jugó la final. Hay que demostrarle al jugador que el equipo debe tener determinado funcionamiento. Un poco por ahí hay que comenzar a marcar el funcionamiento.

¿A qué juegan los equipos de Alejandro Curbelo?

Tengo mi idea, pero uno tiene que ver con lo que cuenta, eso es fundamental. Hay que ver el material humano del que uno dispone. Uno de repente puede decir que le gusta jugar con línea de tres, pero a lo mejor no tienes los suficientes hombres en defensa para jugar con línea de tres. Por otra parte, puedes decir que te gusta jugar con un creativo y no lo tienes en el equipo. Hay que ver qué es lo que hay, las características principales de los jugadores. Con base hay que plantear una idea. Tengo clara mi idea, pero es importante, para planificar la parte táctica, ver con lo que se cuenta. 

Hace algunos meses dirigió a Atenas de Uruguay, en la segunda división. Ahí estuvo desde el banco en 10 partidos. Ganó tres, empató dos y cayó en cinco ocasiones. ¿Qué análisis hace sobre sus números con ese plantel charrúa?

Tuvimos tres semanas de entrenamiento y luego comenzó el torneo con un montón de jóvenes de 17 años. Acá en Uruguay el campeonato es bastante competitivo en segunda división. Para que se tenga una idea, Jesús Toscanini, actual delantero de Juventud Independiente, estaba jugando acá en segunda división. Los resultados demoraron en venir. Hay que poner los números en el contexto. No se tuvo la paciencia y decidí dar un paso al costado.

Este no es el mejor momento en la casa alba. El equipo no logró avanzar a semifinales, tras caer en el repechaje por 1-0 ante Metapán. ¿Tiene claro la actualidad del plantel capitalino?

Sí, muy claro. Tengo que pensar primero en formar un plantel. Debo observarlo bien. Tengo que transmitir la idea a los jugadores para convencerlos. Tenemos mucho que trabajar para afrontar el primer partido. Pero ahora no podemos pensar que el primer partido lo vamos a ganar 8-0. Hay que ir paso a paso. Tomo esto con la responsabilidad que el cargo amerita. 

¿Significa que la gente alba tendrá que tener paciencia para los resultados?

No. La gente deberá tener la paciencia que ha tenido siempre. Yo sé que tengo una determinada identificación con la gente. Como jugador me gané un lugar con la afición, pero el entrenador no puede ver las cosas como aficionado. Mi primer gran desafío es afrontar el primer entrenamiento para comenzar. Después vamos a afrontar la pretemporada. Tendremos que ir de a poquito.

¿Qué le quedó de su primera experiencia en el banquillo de Alianza, como asistente de su paisano Carlos Jurado?

Uno siempre aprende. Yo hice los cursos de entrenador desde el año 2001. Me sirvió un montón. He absorbido un montón de cosas en todas las experiencias que he tenido. Más allá que en Atenas las condiciones no eran las ideales, a uno le deja un montón de aprendizaje. El trabajo del cuerpo técnico de Alianza se va a ver cuando empiece el torneo.

¿Hasta dónde se compromete un hombre como usted, identificado con los colores de Alianza, para lograr hacer un buen trabajo y, por ende, buscar el título?

Es importante hablar del título, es lo primero que vamos a ir a buscar desde el principio. Como Alianza necesitamos recuperar la identidad del equipo y darle a la gente lo que necesita. Uno se pone a pensar que Alianza es un equipo con años de historia y tiene 10 coronas nada más. Y es muy poco para esa gente. Me gustaría darle estabilidad al equipo, es mi anhelo. Alianza tiene que estar en la final, que se gana o se pierde. Alianza tiene que estar en todas la finales. Eso se dice fácil, pero se consigue con trabajo, con estabilidad deportiva y económica. Se consigue con el apoyo de la gente, que eso es difícil en otros equipos, pero en Alianza ya se sabe que es así. Me gustaría darle más protagonismo a Alianza, que es lo que se merece la gente. Pero para lograr eso debe correr mucha agua debajo del puente.