Cambios notables para uno, misma base para el otro. El conjunto local iniciaba el torneo con la misma idea táctica mostrada en el torneo anterior y pocas variantes, todo lo contrario de Alianza, en el que, con algunos cambios en su once inicial, el técnico charrúa Alejandro Curbelo comenzaba a dar una muestra clara de cómo jugará en la nueva era del “ Colo”.

En esta primera idea del equipo visitante, los ojos estaban puestos en Otoniel Salinas, Isidro Gutiérrez y el uruguayo Christian Yeladián, quienes fueron las contrataciones estrella para el conjunto paquidermo en la media cancha.

Sin embargo, ante la ausencia de ocasiones sobre los primeros 10 de juego, fueron los locales quienes pegaron primero. Luego de un centro desde la banda izquierda de Jonathan Jiménez, el delantero cafetero Cristian Gil intentó controlar con el pecho, sin éxito, para que Ronald Ascencio llegara desde atrás para ganar la espalda al defensor Carlos Arévalo y poner el primer gol del torneo y el tempranero 1-0.

Ante el duro golpe en los primeros minutos de juego, los visitantes no tardaron en reaccionar. Mientras Curbelo pedía calma desde el banquillo, en ataque el delantero Nelson Bonilla aprovechó una contra para tomar mal parada a la defensa y servir un pase para Yeladián, que con un potente disparo desde fuera del área puso el 1-1 en el marcador, al minuto 16.

El nuevo fichaje albo surtía efecto y el empate significaba un respiro para los visitantes. A pesar de esto, la intensidad por parte de ambos equipos no bajó, sobre todo del lado de la U, que proponía cada vez más por las bandas gracias a la labor de Jiménez y Gustavo López, que intentaban alimentar con asistencias a Gil.

Ahora bien, Alianza contaba con dos propuestas ofensivas: Gutiérrez y Bonilla, siendo este último el más comprometido en buscar espacios en la última línea de la defensa local. 

Sin embargo, ambos cuadros mantenían la propuesta ofensiva por las bandas, destacando un cuadro universitario que mantenía el ritmo ofensivo, lejos del equipo que el pasado torneo tenía poca presencia en ataque.

El primer tiempo concluiría con la paridad en el marcador, en un encuentro que hasta ese momento de juego no tenía a un claro dominador de la posesión de balón. Por Alianza, las únicas dudas nacían de la defensa, que perdía protagonismo ante los contantes despistes en la marca que permitían que los locales aprovecharan con contundencia para crear opciones de ponerse arriba en el marcador.

Curbelo iniciaría la segunda mitad con una variante en ataque. Sean Fraser salía al campo para acompañar a Bonilla en el ataque ante la salida del juvenil Isaac Portillo. Los escarlatas, por su parte, mantenían su línea de cuatro defensores que pretendía cubrir los espacios de los paquidermos, que ahora contaban con más hombres de peso en la ofensiva.

Nueva Cara

El jamaicano tendría su primera ocasión del partido al minuto 58, después de que un centro preciso de Isidro Gutiérrez lo dejara solo frente a Jassir Deras, que supo leer el cabezazo y tapar con seguridad lo que pudo ser el segundo para los visitantes.

El gol se concretaría para el caribeño seis minutos después, al '64, después de que Carlos Arévalo, quien tuvo un flojo primer tiempo, se adentrara por la banda izquierda para que Fraser volviera a cabecear a placer, solo que esta vez el balón se fue al ángulo de la meta de Deras.

Ya con la desventaja, Jorge García apostó por el ingreso de Sergio Rubio, un cambio que permitió a los pumas tener más llegada y aprovechar los contragolpes para tratar de empatar en el partido; sin embargo, el tiempo no alcanzó a los pupilos de “el Chiquilín”.

Así, Alianza cosechó su primera victoria en el Clausura 2014, con el protagonismo de Fraser y la contundencia de un equipo que intentará ser protagonista de la mano de Alejandro Curbelo. Comenzó la nueva era paquiderma.